NUEVA YORK.- La próxima semana, muchos padres de la ciudad de Nueva York tendrán un dolor de cabeza, si se materializa la amenaza de huelga de los conductores de autobuses escolares.
El paro, que sería anunciado este lunes y que afectaría a unos 150,000 niños, lo realizaría el sindicato de choferes para presionar que se aprueben medidas para proteger a los trabajadores ante posibles despidos.
Tanto el alcalde Michael Bloomberg como el canciller de Educación, Dennis Walcott, han indicado que ellos no pueden garantizar legalmente que ningún conductor pierda su empleo.
Según informaron medios locales hoy, el sindicato de conductores se reunirá este lunes para tomar una decisión sobre la posibilidad de comenzar una huelga el miércoles. Ante esta realidad, las autoridades de la Ciudad han desarrollado un plan para que los estudiantes puedan ir a sus escuelas.
Entre las ideas que se están analizando está la posibilidad de entregar MetroCards a los alumnos para que usen en transporte público, al igual que a los padres que deben llevar ellos mismos a los más pequeños.
Además, aquellos padres que viven muy lejos y no pueden usar el transporte público, recibirán un reembolso por usar sus propios vehículos para transportar a los niños a las escuelas.
La huelga sería la primera desde 1979, cuando los choferes dejaron de trabajar por 14 semanas.
0 comentarios :
Publicar un comentario