Por Ana Pereyra.- El próximo año celebraremos elecciones municipales y congresionales en varios distritos de New Jersey , y aunque es prematuro hablar de escrutinios, es necesario un cambio de lideraszgo, por lo menos en la ciudad de Passaic.
En dicha ciudad, donde la mayoría son hispanos y sus líderes son de ese grupo etnico,creemos que hemos logrado pocas conquitas, por no decir ninguna, por esa minoría.
Se hace necesario realizar una revisión de nuestras autoridades electas y pensar en un cambio,que favorezca no solo al tres por cientos de los residentes de Passaic, sino de todos.
Creemos que el compromiso de nuestras autoridades y nuestros líderes, debería ser por igual para todos, porque para ese fin, fueron elegidos.
Creemos firmente, que en la contienda que se avecina, deberíamos echar un vistado a los líderes que están surgiendo, dándole una oportunidad, de que demuestren no solo su capacidad de liderazgo, sino también de servirle a su comunidad.
En ese contexto, exhorto a prestar mucha atención a los nuevos candidatos, quienes al parecer tienen muy buenas intenciones para la comunidad.
Aunque tenemos que reconocer, que para gobernar no solo se necesitan buenas intenciones, hay que tener coraje, decisión y madera de liderazgo, y me arrriesgo apostar por la nueva generación, porque cualquiera de ellos podría ser el futuro alcalde de Passaic.
Los apoyaría no solo porque son sangre nueva, sino porque han trabajado o trabajan por tiempo en la Junta de Educación, y esto podría ser una buena carta de presentación, para ayudar con la deficiencia en ese campo.
Para nadie es un secreto la proliferacién de las pandillas en Passaic, nuestros jóvenes merecen mejor suerte, y ello se logra con la educación. Debería existir programas de ayuda donde nuestros hijos tengan la mente ocupada, esto le imposibilitaría pensar negativamente.
Podríamos empezar abriendo programas de deportes, buscar la forma de que empresas privadas y las gubernamentales les faciliten empleos de medio tiempo y otras actividades, donde los jóvenes puedan aprovechar su capacidad productiva.
Es posible que mucha de nuestra juventud, incluso los que pertenezcan a pandillas, podrían ser o convertirse en líderes comunitarios, porque la falta de orientacion los mantienen en las calles como un barco a la deriva.
Nuestros jóvenes merecen mejor suerte, y eso se consigue ofreciendole oportunidades a un nuevo lederazgo, por lo que sangre nueva debe ‘derrarmase” en la próxima contienda electoral.
Es hora ya, no solo de lavarle la cara a Passaic, sino que sea una de las cuidades del Estado Jardin con mejores índices de jóvenes profesionales, y sobretodo, con lideres comunitarios con futuro, y ello solo se logra con la educación.
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