Las zonas costeras de los estados de Alabama y Florida continuarán bajo emergencia ante pronósticos de intensas lluvias, como las que afectaron varios condados y causaron inundaciones durante el fin de semana.
Según reportes meteorológicos, el área de baja presión y la tormenta que azota esa parte de Estados Unidos avanzarán en esta jornada hacia el interior y el sur, por lo cual afectarán ciudades como Birmingham y Atlanta.
Las autoridades advirtieron a la población, en especial de las áreas más vulnerables, a permanecer en sus casas y evitar salir a las calles para evitar pérdidas humanas.
Estimaciones preliminares ubican en más de 20 millones los daños registrados en la infraestructura vial e inmobiliaria de Florida y Alabama, sobre todo en las localidades ribereñas del golfo de México.
Ambos estados registraron centenares de evacuados, así como miles de viviendas, establecimientos privados y públicos inundados y sin electricidad, aunque no reportaron víctimas mortales.
Según la prensa local, hubo lugares donde las aguas alcanzaron más de un metro de altura.
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